Ayer pude hacer mi primera escapada a los bosques y me encontré este regalo de la naturaleza demostrando que las lluvias han sido fructíferas y que las primeras setas de finales de verano están empezando a salir.
La Amanita Vaginata engloba a una serie de especímenes, todas muy parecidas entre sí, que tienen en común el inconfundible color a ceniza. Es la típica seta que más vale dejarla donde está, porque su apariencia nos podría llevar a grandes disgustos por su parecido con la Amanita Panterina o la Amanita Virosa.
Con las Amanitas no se juega, es como vacilar a un gitano, no es buena idea.
El aspecto de esta seta es bastante inconfundible, es una seta que puede alcanzar los 10 cm (o más) en el sombrero, de tallo alto, hasta 20 cm. El sombrero tiene un característico color a ceniza desde su nacimiento, con los bordes estriados como una sierra y con restos grandes del saco, cosa bastante curiosa. Carne débil y quebradiza, casi inexistente, el sombrero se puede decir que son las láminas sujetas por una cutícula, láminas blancas, libres y desiguales.
En cuanto al tallo, es largo como ya he comentado, blanco y sin anillo. Hueco en la madurez y con unas estrías muy llamativas como podéis observar en la foto, pareciese como que el anillo se fundiera en el pie.
Muy característica es la forma del saco, embudado, largo y fino, de ahí que se la llame "enfundada".
Por su característico color y sus estrías es fácil de identificar. Suele salir en corros de varios ejemplares pero no es extraño verla por separado. Le gustan los bosques caducifolios, como los encinares o robledales, pero también las podéis encontrar en pinares, sobre todo en sus límites.
No es una especie muy abundante, más bien extraña de ver. De carne dulce, es una seta tóxica en crudo (Síndrome Hemolítico). Hay que hervirla durante largo tiempo para poder acabar con sus toxinas. Entre la fragilidad de la seta y la obligación de tenerla que cocinar durante largo tiempo, la hacen una especie sin valor culinario.
No recomiendo en ningún caso consumir este tipo de setas, como siempre digo, una foto y poco más.
Con las Amanitas no se juega, es como vacilar a un gitano, no es buena idea.
En cuanto al tallo, es largo como ya he comentado, blanco y sin anillo. Hueco en la madurez y con unas estrías muy llamativas como podéis observar en la foto, pareciese como que el anillo se fundiera en el pie.
Muy característica es la forma del saco, embudado, largo y fino, de ahí que se la llame "enfundada".
Por su característico color y sus estrías es fácil de identificar. Suele salir en corros de varios ejemplares pero no es extraño verla por separado. Le gustan los bosques caducifolios, como los encinares o robledales, pero también las podéis encontrar en pinares, sobre todo en sus límites.
No es una especie muy abundante, más bien extraña de ver. De carne dulce, es una seta tóxica en crudo (Síndrome Hemolítico). Hay que hervirla durante largo tiempo para poder acabar con sus toxinas. Entre la fragilidad de la seta y la obligación de tenerla que cocinar durante largo tiempo, la hacen una especie sin valor culinario.
No recomiendo en ningún caso consumir este tipo de setas, como siempre digo, una foto y poco más.
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